martes, 18 de marzo de 2025

Política: vencedor y perdedor. El buen vencedor tiene alteza. El buen perdedor tiene majestad

En la política, siempre hay un vencedor y hay un perdedor. El buen vencedor tiene alteza. El buen perdedor tiene majestad. El buen ganador es vencedor. El buen perdedor es invencible. El mal ganador se da por soberbia, por vanidad, por estupidez, por misantropía y por inconsciencia.
Para los griegos, Nike fue la diosa de la victoria y Hades fue el dios asociado con la derrota, en realidad ninguno existe ni diosa ni dios, solo uno verdadero, trinitario, Padre celestial. La victoria y la derrota siempre nos pueden dar mucho. Pero nunca son para siempre y, por eso, deben ser tratadas como dos impostoras de paso.
El mal ganador se da por soberbia, por vanidad, por estupidez, por misantropía y por inconsciencia. El mal perdedor se da por envidia, por cobardía, por terquedad, por irresponsabilidad y por enajenación.
Claudia Sheinbaum fue una vencedor excluyente, racista y xenófobo pues los gringos también son extranjeros. Y es que, Claudia es igual que AMLO, quien como perdedor, tuvo una derrota muy honrosa que él mismo se encargó de convertirla en una derrota vergonzosa.
Adolfo Hitler fue malo en la victoria. Intrigante, intolerante e inconsciente. Así como fue malo en la derrota. Terco, cobarde e irresponsable. Maximiliano Robespierre fue un vencedor soberbio, fantasioso y cruel. Así como fue un derrotado humillado, solitario e indefendible.
Y qué decir de la gobernadora Indira Vizcaíno quien perdió la diputación federal contra Kike Rojas en el 2015, así como Viridiana Valencia Vargas la diputación local distrito XV de Tecomán que le ganó Adriana Mesina a ella y a Juan Carlos Pinto Rodríguez, humillado en esa elección.
Indira hoy la vemos intolerante, inconsciente, irresponsable, una vencedora con mucha soberbia.
Y así, Armando Reyna Magaña, quien perdió la regiduría en el 2015 cuando presionó en el PRI para que se la dieran pero no llegó porque Arturo García Arias perdió las elecciones del 2015.
Hoy que Armando es alcalde de Tecomán gracias a AMLO que utilizó el recurso público y el instituto electoral para el fraude vemos a un presidente, a un mal ganador con soberbia, invadido por vanidad, por estupidez, por misantropía y por inconsciencia, la prueba es que no contesta mensajes, llamadas, está a la orden de la gobernadora y no de su patrón que es el pueblo quien le paga un jugoso sueldo, dinero del pueblo contribuyente.
El mundo ha vivido tiempos de victorias y tiempos de derrotas. Hoy, la derrota reina en casi todos los países. En México estamos viviendo derrotas tanto de este sexenio como del anterior, los derrotados son millones de mexicanos que pasan hambre porque todo está caro, que no hallan a sus familiares desaparecidos, que viven en pobreza extrema y desempleados, mexicanos derrotados por la corrupción, le narcotráfico, la injusticia, la impunidad.
Se advirtió no votar por Morena y aliados porque traen la cultura de la muerte y no son Pro-Vida.
Hoy México está derrotado en todo el País.
Si bien es cierto la delincuencia incontrolable comenzó hace 40años y nos sigue derrotando, pero resulta que están los mismos de aquel entonces, donde AMLO pertenecía a aquel PRI que hoy gobierna en Morena. La corrupción intolerable comenzó hace 50 años y nos sigue derrotando, pero son los mismos de aquel tiempo. El narcotráfico irrefrenable comenzó hace 40 años y nos sigue derrotando. El debilitamiento de la autoridad, la merma de la gobernabilidad y la fragilización de la institucionalidad comenzaron hace 25 años y nos siguen derrotando. Pero, son los mismos, los que nos gobernaban desde el PRI ahora nos gobiernan desde Morena. Buen día y gracias por leerme!!

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