Por: Raúl Avila Vázquez
Nacho Peralta deberá de realizar depuración radical de la clase laboral de confianza actual, para obtener la credibilidad de la sociedad y responda a las aportaciones fiscales obligadas.
Cortar el mal de raíz es doloroso pero necesario, quie nes tienen aún la planta laboral por amistad, compadrazgo, recomendaciones o padrinazgos, deben emigrar a otros sitios en donde desarrollen sus habilidades adquiridas en la calle, porque la mayoría, ahí aprendieron.
Cómplices del debacle financiero propiciado por Mario Anguiano Moreno quien como sus caballos, se llevó entre sus patas a los alcaldes, son merecedores de un despido voluntario obligado.
Complicidad, porque sin ser afines en la actividad laboral y sin el perfil adecuado, ocupan un sitio que debe ser para quien se esmeró por prepararse para servir con profesionalis mo a la sociedad y que son parte del grupo de desem pleados y para sobrevivir, se dedican a oficios ajenos a su aprendizaje en las aulas universitarias.
Peor aún, buscan ser basificados para gozar de por vida, de los privilegios que otorgan los sindicatos.
Por eso, Ignacio Zambada Torres alcalde interino de Colima, se dice a favor de que los actuales gobiernos eviten basificar y sindicalizar a trabajadores de confianza.
Y es que la medida sería una de las tantas soluciones de raíz para buscar mejorar las finanzas de los municipios.
Coincido con esta lógica, aunque son temas que no hemos tocado en el Cabildo, pero cuando se haga, será con mucha responsabilidad antes de tomar decisiones”, señaló.
Indicò que tan sòlo en Colima, el 80 por ciento de los recursos se destina al pago de servicios personales, en donde la flota de trabajadores ha sido acrecentada por administraciones anteriores desmedidamente.
“Es un compromiso acumulado con la clase laboral y la gente no tienen la culpa, ellos tienen un trabajo y merecen la atención, la bronca es la realidad económica de la figura de municipio”, comentó.
Zambada Torres destacó que el aumento en la plantilla laboral así como en las deudas heredadas por administra ciones anteriores, han generado estas crisis financieras, no sólo en Villa de Álvarez, sino a nivel estatal y federal.
“Hay un origen y una causa de la insostenibilidad financiera, venimos acumulando compromisos que no se han cumplido en años, porque no se ve la capacidad financiera real de los Ayuntamientos, y para que las arcas mejoren, es necesario encontrar los equilibrios y racionar el gasto, conocer nues tros alcances como gobierno municipal y estar conscientes de ellos, porque se gasta más de lo que se tiene, todo eso en un acumulado de varios trienios en donde no se ha generado una estabilidad, se debe reconocer la situación real y en base a ello tomar otras decisiones”.
Tan sólo Colima, soporta el peso de una deuda de 60 millones de pesos.
Tecomán no se queda atrás.
El edil Tito Vázquez se lamenta de que los dineros presu puestados anualmente el 90% se destina a pagar salarios de la burocracia sindical, el resto, es para obra pública.
Por ello, recurriò a la Federaciòn para bajar dinero que canalizò a la ejecución de trabajos de impacto social y turìstico como son las ampliaciones de carreteras, libra miento arco sur poniente, parque González Lugo, nuevo cementerio, parque metropolitano, mejoramiento de drenaje sanitario, conducciones de agua potable y nuevos pozos abastecedores como el de Palma Real II, alumbrado público, equipamiento vehicular para las direcciones de servicios públicos, seguridad pública y COMAPAT entre otros.
Basificar más personal de confianza, terminarían de colapsar las finanzas municipales de Tecomán, como ya ocurre con los demás municipios.
Por eso, Nacho Peralta debe asumir una responsabilidad crucial en ese sentido, comenzar con gente nueva, la nece saria, escatimar el gasto público, generar las condiciones para abatir el desempleo con las invitaciones a inversionistas que ofrezcan trabajos bien remunerados, sólidos y a largo plazo, aprovechar los potenciales turìsticos y pesquero, fortalecer el campo agrícola con apoyos directos a quien produce, abrir esquemas de financiamiento a micros y medianos empresarios y dejar de respaldar los proyectos a industriales, que cada día son millonarios gracias al esfuerzo de trabajadores que ganan 80 pesos diarios con jornadas hasta de diez horas,
No es tarea fácil, pero es imperativo hacerlo.
Nacho debe aprovechar la amistad con Luis Videgaray y con Enrique Peña Nieto, con gobernadores de otras Entidades que pueden ayudar a reactivar la economía con intercam bios laborales y con inversionistas de esos lugares.
Tenemos municipios como el de Armería, al que le urge motivación para evitar la emigración de jóvenes en busca de mejores oportunidades.
A Armería un hospital general le caería bien para la genera ción de empleos y levantar su caída financiera.
Nacho pues, debe mover bien las piezas del ajedrez, con tino, con reflexión, con paciencia pero con firmeza.
Pero tambièn no debe solapar ni proteger las raperías ya cometidas, debe fincar responsabilidades penales a quienes dañaron las arcas estatales por cualquier vía, presentar las denuncias correspondientes ante las autoridades competen tes para sancionar corporalmente a quienes se beneficiaron con el erario público.
Protegerlos sería perder aún más la credibilidad ciudadana que tiene la esperanza en que Nacho, si aplicará la justicia.
No es tarea facil, pero alguien tiene que hacerlo, y bien.
Y en ese campo sancionador, deben ir los ex alcaldes que aceptaron convenios ventajosos para la clase sindical y que gracias a ellos, los municipios están hundidos.
Es pues, Nacho Peralta, el Aladino que ocupa una lámpara para que surja el genio, le limpie y se lleve la podredumbre que deja Mario Anguiano Moreno.
Es cuanto
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