En un boletín de la comunidad nahua de Santa María Ostula, de la que es originario Verdía, se informó que por el ataque militar falleció el niño Herilberto Reyes García de 12 años y resultó herida la niña Neymi Natalí Pineda Reyes de 6 años; Antonio Alejo Ramos de 17; Horacio Valladares de 32 años y Melesio Cristiano de 60.
El hecho aconteció cuando alrededor de un millar de elementos de la Secretaría de Marina Armada de México (Semar), ingresaron violentamente a Ostula alrededor de las 17:00 horas para liberar a un centenar de militares que pobla dores mantenían retenidos en exigencia de diálogo y por la liberación de su comandante.
Agustín Vera, jefe de la Tenencia de Ostula, informó vía telefónica lo anterior.
La retención de tres pelotones de soldados, se realizó alrede dor de las 10:30 de la mañana, porque irrumpieron en Ostula “con mucha violencia, chocando camionetas y echaron disparos al aire”, poco después del arresto del líder indígena en el poblado de La Placita.
La Procuraduría General de la República (PGR) informó en un comunicado que el arresto de Verdía, se realizó por su “probable responsabilidad en violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos”.
Según la PGR, a Verdía lo encontraron en “posesión de dos fusiles, uno calibre 7.62 conocido como cuerno de chivo y el otro calibre .233, además de una arma corta calibre 9 mm y 69 cartuchos útiles”.
De igual manera “por delitos del fuero común y federal relacionados con la destrucción de material electoral”.
El comandante Héctor Zepeda Navarrete de Coahuayana, aseguró vía telefónica que como protesta en contra del arresto, las comunidades que están al pie de la carretera costera de inmediato colocaron retenes en Ixtapilla, La Ticla, el puente de Coahuayana y la carretera de Coalcomán que va a la costa.
Sin embargo, la tensión subió “y los militares le dispararon a la gente”, dijo.
Zepeda exigió la liberación de Verdía, por considerar que las autodefensas y elementos de la Fuerza Rural de la costa “son los más limpios de Michoacán”.
Opinó que la detención se debió a que siguen combatiendo al cártel de Los Caballeros Templarios en la región, por lo que el 25 de mayo pasado el comandante nahua sufrió una emboscada en la carretera costera de la que salió librado.
Como responsable del ataque, fue encarcelado el presidente municipal de Aquila Juan Hernández de militancia priista, quien declaró que “había ofrecido 2 millones de pesos para que mataran a Semeí”.
El nahua fue legalizado como comandante de la Fuerza Rural el pasado primero de abril.
Estuvo en el exilio un par de años, luego de que en su familia sufrieron ejecuciones y secuestros a manos del cártel.
La comunidad de Ostula registra desde 2009 un saldo de 32 comuneros ejecutados y seis casos de desaparición forzada a manos del cártel.
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Tras la refriega que se registró la tarde de hoy domingo en Aquila, suman hasta el momento seis las personas heridas de ese enfrentamiento, en el que también se confirmó una pérdida humana.
De acuerdo con información desde el lugar de los hechos, son tres personas más las que arribaron al Hospital de Coahuayana, en donde ya eran atendidas tres víctimas más, después de la captura del líder de los grupos comunitarios de aquel municipio, Cemeí Verdía.
Sin embargo, los tres primeros fueron trasladados a un nosocomio de Tecomán, Colima, auxiliados por ambulancias de la Policía Federal y de la Cruz Roja.
Según los comentarios de los habitantes de Aquila, se presume que existen más personas heridas del tiroteo entre uniformados y civiles armados que intentaron evitar la aprehensión de su líder.
Además de la detención del primer comandante de la policía comunitaria de Ostula Cemeí Verdía, se denunció la detención de un número todavía indeterminado de personas detenidas en los parajes de El Duín y Xayakalan, en donde la comunidad también mantiene puestos de vigilancia de autodefensas.
A través de las redes sociales, Valor Michoacán publicó un comunicado a la población en general, en el que detalla que alrededor de las 10 horas de hoy domingo, elementos del Ejército llegaron a esos parajes y de manera violenta detu vieron a varios miembros de la comunidad que estaban en el lugar.
Detallan que ambas acciones, los militares no presentaron órdenes de aprehensión y desconocen los delitos por los que detuvieron a las personas, quienes hasta el momento no han sido presentados ante ninguna Agencia del Ministerio Público, por lo que ignoran su paradero.
Por tal motivo, ante las acciones emprendidas por las fuerzas federales, la comunidad de Santa María Ostula se movilizó y mantiene retenidos a miembros del Ejército Mexicano que participaron en las agresiones, por lo que advirtieron de una situación de tensión extrema en la región. "Debemos puntualizar que el compañero Cemeí Verdía, ha sufrido tres antentados, el último de ellos planeado por miembros del gobierno estatal, municipal, mineros y lugarte nientes de los llamados Caballeros Templarios" señala el comunicado de Valor por Michoacán.
Finalmente hacen un llamado a estar atentos y alertas ante la situación que se vive en la comunidad de Ostula y en la región de la Costa-Sierra, a fin de "detener esta nueva escalada del Estado mexicano en contra de la comunidad indígena de Santa María Ostula y los otros pueblos de Costa-Sierra de Michoacán".
El Grupo de Coordinación Michoacán tiene el firme compro miso de que los derechos humanos sean respetados en todas las acciones operativas, que deben tener como objetivo primordial salvaguardar la integridad y bienestar de la población; en razón de ello, promoverá que se realicen las investigaciones pertinentes con el propósito de identificar al grupo armado que agredió a la población y a las autoridades en la comunidad de Ixtapilla, y en su caso, deslindar las responsabilidades correspondientes.
De acuerdo con un comunicado de prensa, en el ataque resultaron heridas cuatro personas de 63, 17, 32 y seis años de edad.
Lamentablemente perdió la vida un menor que tenía 12 años de edad.
La delegación de Protección Civil Estatal en Coahuayana, recibió el reporte de los heridos a las 17:06 horas y procedió a trasladarlos al Hospital de Coahuayana.
Posteriormente, una ambulancia de la Policía Federal y otra de la Cruz Roja, trasladó a cuatro heridos a un hospital de Tecomán, Colima.
De estos hechos se informó a la Fiscalía Regional de la Procuraduría General de Justicia del Estado, por lo que el agente del Ministerio Público auxiliado del representante social, se trasladó al lugar e inició averiguación previa.
En estos momentos continúa con las diligencias correspon dientes.
El Grupo de Coordinación Michoacán lamenta el ataque contra la población civil, y ofrece todo el apoyo a los familiares de las personas afectadas.
Asimismo, reitera que promoverá que se realicen las investi gaciones para deslindar responsabilidades, y que este artero hecho no quede impune.
Luego de que autoridades gubernamentales confirmaran la detención del líder de los guardias comunitarios de la región de Aquila Cemeí Verdía Zepeda por la presunta posesión de armas de uso exclusivo del ejército, ahora será la Procura duría General de la República la que determine su status jurídico.
A través de la cuenta de whatsapp, el área de comunicación estatal reveló a reporteros de la fuente, que el dirigente armado habría sido detenido con armas no registradas ante la Secretaria de la Defensa Nacional.
La confirmación se registró a través de un despacho informático del Grupo de Coordinación Michoacán, que integra a varias áreas de seguridad del Estado y Federación. Cemeí Verdía Zepeda fue requerido la mañana de hoy domingo en la tenencia de La Placita por elementos del Ejército Mexicano y de la Secretaria de Marina.
Trascendió que el líder armado fue detenido y trasladado vía área a la delegación estatal de la Procuraduría General de la República, ubicada en la capital michoacana.
La aprehensión del líder armado detonó un escenario de confrontación en aquella zona de la región sierra-costa de la entidad, en el que simpatizantes de Verdía Zepeda acudieron a bloqueos carreteros en protesta por la acción del gobierno federal, además de un enfrentamiento en el que perdió la vida un niño de 12 años de edad y seis personas más heridas por arma de fuego.
En junio del 2014, el también líder y fundador de los grupos de autodefensas José Manuel Mireles Valverde, fue detenido en la comunidad de la Mira, en el municipio de Lázaro Cárdenas.
El vocero de las autodefensa fue aprehendido por integran tes del Ejército Mexicano, de la Marina y de la Policía Fede ral, junto con 82 de sus compañeros, quienes fueron puestos a disposición de la PGR y trasladados al penal de máxima seguridad de Nayarit.
Mireles Valverde fue acusado al igual que Cemeí Verdía, de violar la Ley Federal de explosivos y armas de uso exclusivo del Ejército Mexicano.
La lucha política de familiares del líder armado y de grupos civiles, provocaron que la Procuraduría General de la Repú blica desistiera de sus acusaciones y abril la posibilidad a la liberación de Mireles Valverde, quien recién cumplió un año en un penal de máxima seguridad del noroeste del país.
Aún se asegura que la detención de Mireles Valverde obedeció a asuntos políticos y a su negativa de integrarse a los lineamientos del entonces Comisionado para la Seguri dad y Desarrollo Integral de Michoacán Alfredo Castillo Cervantes.
Antes de su detención, Cemeí Verdía fue objeto de un atentado durante el mes de mayo, donde varios integrantes de las guardias comunitarias perecieron bajo las balas de grupos delincuenciales.
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Hace poco más de un mes, los policías indígenas que intentaron expulsar infructuosamente al cártel de “Los Caballeros Templarios” de su territorio en el año 2009, regresaron y tomaron el mando de Santa María Ostula, Municipio de Aquila.
Esta es una de las comunidades pioneras en la lucha por la defensa del territorio y en ejercer el autogobierno, con influencia del modelo zapatista.
Ahora, busca continuar con su proceso truncado de crear su policía comunitaria, cuerpo de seguridad que es distinto al de los grupos de autodefensa mestizos que tienen presencia en 23 municipios de Michoacán.
Mientras las autodefensas surgen como una expresión de justicia popular extrema y no están obligadas a responder por sus actos ante la ciudadanía a la que protegen, la policía comunitaria es nombrada por la población en una asamblea, y es parte de la estructura del sistema de cargo tradicional.
Ostula es un referente emblemático en el movimiento de las autonomías indígenas, por lo que el subcomandante Marcos la visitó en el año de 2006 durante su recorrido de La Otra Campaña.
En esta comunidad nació la primera autodefensa contra el crimen organizado del México del Siglo XXI en 2009, dos años antes que la de Cherán, con un saldo de 32 muertos y seis casos de desaparición forzada.
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El 8 de febrero de 2014, a las 2:30 de la tarde, un grupo de siete nahuas exiliados por el cártel, liderados por el productor de papaya Semeí Verdía, tomaron el pueblo acompañados por unos 40 guardias rurales de autodefensas de cuatro municipios.
Otro de los exiliados en el grupo era Freddy Cruz, el nieto de don José Trinidad de la Cruz don Trino le llamaban, el luchador social que criminales secuestraron y posteriormente torturaron y ejecutaron, cuando guiaba a una delegación del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD) en Ostula, el 6 de diciembre de 2011.
Cuando hace un mes la autodefensa se internó en Ostula, el pueblo lucía fantasmal, como abandonado.
Sus habitantes vivían temerosos de salir a la calle.
Los guardias civiles ni siquiera tuvieron que repeler enfrenta mientos, pues el avance regional de las autodefensas había hecho huir en días pasados a los templarios de la zona.
Semeí Verdía tenía cuatro años de no pisar su pueblo monta ñoso, cercano a la costa.
Cuando lo hizo, “volví a nacer”, dice.
A los cuatro días, las autoridades locales convocaron a una asamblea popular para decidir si se aceptaba a la autode fensa y el regreso de los exiliados. A la asamblea asistieron alrededor de mil 200 personas, y como invitados, unos 500 guardias ciudadanos de los municipios participantes en la toma: la cabecera municipal de Aquila, Coalcomán, Coahua yana y Chinicuila.
Ahí, a mano alzada, la comunidad de Ostula aprobó la permanencia de la autodefensa, crear su policía comunitaria y nombrar a Semeí Verdía como su comandante.
En 2009 la tenencia de Ostula y las 22 rancherías indígenas que la integran decidieron organizarse en defensa de su territorio que comprende 19 mil hectáreas.
Sus bosques eran devastados por talamontes y pequeños propietarios mestizos de La Placita, el pueblo refugio del cártel en la región.
Los despojaron de mil 200 hectáreas de su territorio costero con gran potencial turístico.
Entonces la tenencia que tiene un millar de pobladores decidió crear su policía comunitaria y entrar en un litigio legal por las tierras.
El abogado de Ostula - que pide el anonimato- dice que “el ejido ganó un amparo para que no le fueran conculcadas sus garantías individuales”, por lo que el 29 de junio fundó en el territorio arrebatado un nuevo asentamiento llamado Xayakalan.
El abogado dice que así inició una oleada de “desaparicio nes de comuneros o asesinatos de comandantes de los comunitarios”.
El caso más sonado fue la ejecución de don Trino cuando guiaba a la caravana del MPJD en su trayecto de Ostula a Xayakalan, pues la Policía Municipal que los acompañaba, de forma inexplicable se replegó a la entrada en el camino de terracería al nuevo asentamiento.
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Cuatro criminales les salieron al paso y bajaron al hombre de 73 años. Su cadáver apareció con signos de tortura, cuatro impactos de bala y las manos amarradas por la espalda. Su crimen y los otros 31 quedaron impunes.
Comuneros de La Placita, que se dicen los poseedores de las tierras de Xayakalan, niegan vínculos con el cártel y aseguran que ya ganaron el litigio.
El abogado de Ostula ahonda que la comunidad tiene más interesados en el despojo de sus tierras, pues recién se enteraron que hay una decena de concesiones para la explo tación minera otorgadas sin autorización del pueblo indígena.
Semeí Verdía dice que el 20 de febrero de 2010 vestido de futbolista, debió huir del convoy armado que pretendió levantarlo en plena cancha, cuando él disputaba un torneo de fútbol.
“Había más de 500 espectadores”, explica.
El joven dirigente era entonces uno de los más activos de la comisión en defensa de la tierra de Ostula y fue el primero en ser extorsionado.
Cuenta que cuatro meses antes, el crimen le exigió 50 mil pesos pero lo ignoró.
No obstante, los templarios intentaron secuestrarlo durante el partido de fútbol, pero el nahua logró correr y esconderse en el monte para salir del Estado.
Luego se multiplicaron los casos de extorsión y muerte.
Así, en abril de 2011, a Freddy Cruz el crimen lo extorsionó con 70 mil pesos.
El joven habló con su familia y emprendió por igual un exilio forzado.
Lo mismo hizo un número indeterminado de víctimas.
Semeí Verdía observó la cadena de levantamientos surgidos en Tierra Caliente desde el 24 de febrero de 2013 y buscó liberar a Ostula.
Tras el asesinato de don Trino en 2011, la comunidad y sus 22 rancherías quedaron aisladas sin atención mediática, bajo el cerco del cártel.
Desde septiembre de 2013 el luchador nahua contactó a Misael González, cabeza de la autodefensa de Coalcomán, el Municipio vecino. Igual buscó sumar a sus planes a otros exiliados.
Semeí Verdía concretó sus planes por dos hechos: el asesinato de su primo Joel Navarrete Zepeda, un mecánico del Municipio aledaño de Coahuayana, el 13 de enero pasado, que por cierto detonó el surgimiento de la autodefensa en el Municipio. Y la firma entre el Gobierno Federal y el Consejo General de Autodefensas y Comunitarios de Michoacán el 27 de enero para su proceso de legalización.
El 8 de febrero la autodefensa tomó Ostula, y dos días después, un convoy de 60 militares, al mando del general de zona, intentó desarmarla.
Finalmente, los militares regresaron el arsenal decomisado.
En lo inmediato, Ostula enfrenta el desalojo de Xayakalan y el arribo de las empresas mineras.
El lugar ganó una batalla, pero la guerra por la defensa de su territorio, continuará./ / PROCESO DIGITAL Y QUADRA TIN, MICHOACAN.
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