Un hecho vergonzoso para la Armada de México se registró en la calle Laurel, del Barrio II del Valle de las Garzas, cuando elementos de la Policía Municipal detuvieron a un adolescente, de quien no se revelaron los generales, por haber golpeado a una mujer al parecer su ex novia.
Los vecinos al darse cuenta de la agresión, pidieron el apoyo de la policía y los uniformados llegaron a la calle en mención, donde también se ubican cercas los edificios de la Armada de México, los cuales son usados como viviendas por el mismo personal militar y sus familias, por lo que el agresor aprovechó para pedir auxilio, ya que argumentaba que su papá era elemento de la Marina.
Y los marinos entraron en acción, rodearon las patrullas y trataron de evitar el arresto, pero los policías siguieron firmes en su misión de resguardar el orden y la paz.
Luego los marinos provocaron la discusión con policías que cumplían su deber y los animos se calentaron, por lo que vecinos intervinieron en la discusión para exigir el cumplimiento de la ley y no la protección, alegando para que detuvieran al agresor y los marinos lo permitieran.
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