Celeste Briceño Orozco
Con el tamiz metabólico y auditivo neonatal que se aplica en los hospitales de la Secretaría de Salud y Bienestar Social del Gobierno del Estado se evitó en el 2014 la discapacidad de 36 niños que resultaron positivos o sospechosos de ceguera, retraso mental y sordera al realizarse en estas unidades de salud la detección y el tratamiento oportunos de estos casos.
La dependencia estatal, a través del Departamento de Salud Reproductiva, dijo que un factor importante para evitar la discapacidad en los recién nacidos es que el tratamiento de la mayoría de los casos se inicia antes de los 15 días de vida, mientras el lineamiento marca antes de los 30 días, toda vez que en la medida que se prolongue la intervención, existe mayor riesgo de que el bebé padezca un defecto de ceguera o retraso mental.
Señaló que se garantizó el desarrollo pleno a 8 mil 241 niñas y niños nacidos el año pasado al aplicar el tamiz metabólico neonatal que previene discapacidades como ceguera, retraso mental, daño al riñón, hígado e incluso la muerte, de los cuales 22 resultaron sospechosos y 8 dieron positivos al tamizaje, mismos que recibieron el tratamiento oportuno y evitaron la discapacidad.
Asimismo, agregó que a 8 mil 032 neonatos se les realizó el tamiz auditivo neonatal, identificando a 28 sospechosos de sordera, aunque sólo uno requirió auxiliares auditivos, mismos que le permitirán su habilitación auditiva.
La Secretaría de Salud recordó que con el tamiz metabólico sólo se detectaba el hipotiroidismo congénito (retraso mental), pero desde el 2011 se amplió la detección a tres padecimientos más: hiperplasia suprarrenal congénita (alteraciones hormonales y trastornos en genitales), galactosemia (daños al hígado, riñón y ceguera) y fenilcetonuria (retraso mental y discapacidad intelectual).
Dijo que este año se incorporará la medición de biotinidasa y marcadores para la determinación de fibrosis quística.
De la misma manera, refirió que el año pasado se implementó la Estrategia de Desarrollo Infantil en 9 mil niños y niñas menores de 5 años de edad, habiéndose detectado y tratado en el segundo nivel de atención (hospitales) a 42 niños que resultaron con algún tipo de retraso.
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