Por Carmen Villa
Saltillo, Coah.- (Zócalo Saltillo).- Pedro, de 8 años, fue a la casa de su vecina para pedirle que le regresara un globo perdido en su cochera, sin embargo cuando la mujer abrió el portón, un perro pitbull se abalanzó contra el rostro del menor, quien requirió 24 puntos de sutura; ante lo ocurrido, la propietaria del animal se niega a cooperar con la familia del menor.
El ataque se registró el sábado alrededor de las 21:30 horas, después de que Pedro se encontraba jugando en compañía de cuatro amigos, sobre la calle Ulises, de la colonia El Rodeo, cuando de pronto un globo se voló a la cochera de su vecina Cindy, habitante del 225.
Ante esto, el menor tocó el timbre del domicilio y Cindy salió de la vivienda para entregar el globo al menor, pero desafortunadamente al abrir la puerta, el perro se abalanzó contra el menor y le mordió el cachete izquierdo.
Cuando el perro atacó al menor, la vecina logró separar al perro del pequeño, pero para ese entonces el menor ya había sufrido fuertes daños en su rostro, por lo que simplemente llevó al infante a su casa y lo entregó a sus padres.
Debido a la emergencia, los padres del menor decidieron trasladarlo al hospital La Concepción para que recibiera atención médica, ahí los médicos le hicieron 24 puntadas; posteriormente la dueña del perro se retiró del hospital alegando que no pagaría por los daños ocasionados.
Luego de la actitud de su vecina, Laura Patricia Cervantes Contreras, madre del menor, manifestó que decidieron continuar con el tratamiento, para lo cual personal del antirrábico solicitó la presencia del perro con el objetivo de realizar estudios y ver qué tipo de medicamento se le aplicaría al menor, sin embargo Cindy se negó a atender la solicitud
“Nosotros estamos de acuerdo que los perros deben tratarse con respeto y amor, pero ahí no lo alimentan y lo tienen entre el mugrero, le pedimos a la vecina que lo llevara porque de ese estudio depende el tratamiento de mi hijo, pero no quiere ir y ya nos dijeron que no la pueden obligar, pero mi hijo necesita que ella vaya”, explicó.
Por su parte, los padres de Pedro se presentaron ante el Ministerio Público a interponer la denuncia correspondiente, pero las autoridades se negaron a recibir la solicitud manifestando que la vecina no obligó al perro a agredir al menor y que el animal no se puede responsabilizar por sus acciones.
“Eso lo sabemos, pero también sabemos que si se es dueño de un perro se es responsable de sus acciones, desafortunadamente no es la primera vez que el perro ataca a un niño, con mi hijo son dos”, concluyó.
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