miércoles, 21 de agosto de 2013

CAFÉ CON PIQUETE

Por: el filosofo callejero.-
Manzanillo, Colima.- Ante la denominada lucha contra la delincuencia, agentes de vialidad y de transportes violan dolosamente la ley, afectando con esto la economía y tranquilidad de los ciudadanos, y es que basados en que cada una de las dependencias cuenta con su reglamento, se dan a la tarea de abusar, y detener automotores para así sacar dinero, pese a las actuales condiciones financieras de la mayoría de la gente.
Como ejemplo se cita la tendencia a perjudicar por la falta de licencia de conducir, situación que según el reglamento de vialidad se debe sancionar con una infracción que no exceda de 8 días de salario mínimo, y que en caso de que el automóvil cuente con tarjeta de circulación, y placas vigentes no debe ser detenido, ya que la infracción es contra el conductor, no contra el automotor, cosa que hoy no se respeta, y da paso al abuso de autoridades y grulleros.
Es cierto que si se es detenido de manera tendenciosa, es decir en operativo, se debe acreditar la personalidad del conductor, y que el automotor se encuentre en regla con sus documentos, pero el simple hecho de que falte algún documento es causa directa de detención de la unidad, lo cual a grandes rasgos se ve como un negocio de gobierno el cual es arbitrario, y el que viene a pagar los platos rotos es el pueblo.
Urge definir que reglamento es el que rige a los automovilistas, el de vialidad, o el de transportes, ya que hoy se ve a la población a merced de los mercenarios gubernamentales que abusan deliberadamente del cargo sin siquiera respetar el derecho que tiene el ciudadano de en caso de ser acreedor a la detención de su vehículo, llevarlo personalmente al encierro, y así evitar pagar grúas con tarifas excesivas y no reguladas por la autoridad, de la cual se menciona recibe su respectiva comisión por cada unidad que es arrastrada al encierro

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