Esta semana, con motivo de la celebración del Día de la Lealtad, el Secretario de la Defensa Nacional pronunció un discurso que estuvo muy presente en los reporteros de los medios de comuni cación y en las Mesas de análisis político.
Las celebraciones patrias corren el riesgo de la monotonía. Como se repiten anualmente, pareciera que ya todo está hecho y que todo está dicho.
El ritual cívico es como el ritual religioso, como una misa que se ha repetido siempre sin cambio alguno, sin agregado y sin sustracción.
El tema central de ese discurso fue desde luego, la lealtad, pero tuvo un ingrediente adicional y original; la relación existente entre la lealtad y el honor.
Mientras funcionarios federales hablan de lealtad y honor a México, a nuestros principios, en el municipio, gente de su mismo partido los pierde.
Que honorabilidad puede tener aquél que va aliado con un tipo que ha difamado no una, no dos ni tres, sino decenas de familias, políticos, servidores públicos, empresarios, agricultores, etc.???
Qué honorabilidad pueden tener los enfermos de poder que han enfermado su mente??
Qué honorabilidad puede tener aquél político, que acusa a muchos de corruptos, pero que jode a sus clientes con diez mil pesos para asuntos jurídicos sin resolverlos??
No se puede entonces hablar de una lealtad, cuando la persona que la pide acepta a tipos delincuentes, señalados como violador sexual por la misma ciudadanía, no se puede ir en un proyecto nefasto.
Si algo ha sufrido decadencia en nuestros estilos de ejercicio político es el discurso, el cual, en muchas de las más altas tribunas o de las más importantes voces, ha caído muchas veces en insinceridades, en engaños, en indolencias, en imprecisiones, en histrionismo, en demagogias, en tecnicismos, en cripticida des, en vacuidades, en ligerezas, en irresponsabilidades, en incoherencias, en groserías y hasta en tonterías.
Pero los que no son tontos son la sociedad, esa parte del pueblo pensante y razonable, que sabe que quien difama con mentiras y por beneficio personal, no conviene ni como compañero, menos como amigo, y si en política consideran que ese tipo de sujetos espurios metidos a dirigentes de partido les podrá ayudar, se equivocaron y los resultados ahí están: división, confrontación, rivalidad y hasta adversarios surgieron del mismo partido, del que ya muchos corrieron hacía otros barcos más fortalecidos, con una tripulación honesta, transparente, de equipo, de unidad y sobre todo, de respeto.
Es tan inteligente el pueblo que ha hecho de la alternancia una costumbre, y que vergonzoso será para aquellos que hicieron coalisión que un solo partido sin alianza, les gane y con carro completo.
Salvador Cienfuegos nos unge, nos refresca y nos consuela, con un bálsamo de lucidez. Nos anuncia la esperanza de que muchas de las virtudes políticas de los mexicanos son todavía, rescatables.
Estas palabras que no utilizan las cúpulas de partido son contra rias a las acciones del gobierno federal, que busca lo mejor, pero ponen de candidato lo peor, haciendo alianzas con el más reprochable.
La lealtad, el honor, la moral, la franqueza, la verdad, la seriedad, la responsabilidad, la claridad, la profundidad, la lógica, el respeto, el republicanismo y desde luego, la inteligencia, son cualidades del buen político y quien no las cubra, no merece su voto.
En este sentido y con las palabras que lee en el párrafo anterior expresó nuestro Secretario de la Defensa Nacional, o sea, que el mensaje fue muy claro para los soldados, que ya saben por quién votar y convencer a su familia para que vote por el mejor.
Así, dio cuenta a la Nación, ante el Presidente de la República Peña Nieto, quien también ha sido otro de los rescatistas del discurso mexicano.
Ahora qué pensarán los candidatos del PRI y sus aliados??
Y no fue mensaje mío, sino del Presidente de la República y del Secretario de Defensa…
O sea se equivocaron en Tecomán las cúpulas del partido, porque el honor nacional tan sólo distingue entre leales de traidores y vividores bien conocidos por todos en el municipio.
Es urgente que se rescate el discurso político.
Es muy urgente que los políticos hablen de política.
Es muy urgente que algunos políticos dejen de hablar de tonterías o de cinismos.
Es muy urgente que los tontos y los cínicos dejen de hablar de política.
Es muy urgente poner todo en su lugar.
Es muy urgente escombrar la vida de la República.
Es muy urgente hacer el cambio!!
El pueblo ya no tiene tiempo para seguir perdiendo el tiempo, hay que tirar y desechar lo que ya no sirve.
Hay que limpiar lo que se llenó de mugre.
Hay que rescatar lo que tenemos de valor.
A la mayoría de los mexicanos ya no les interesa la política y eso no es bueno.
La mayoría de los mexicanos ya no cree en la política y eso es malo.
En materia de sistemas políticos a eso se le llama “caída libre”. Los mexicanos han perdido la fe.
Eso es peligrosísimo.
El siguiente paso es que pierdan la esperanza.
Eso sería catastrófico.
Hoy tienen que ir los partidos solos y dejar de mantener en el presupuesto que tanto nos cuesta a partidos pequeños, porque es dinero nuestro y de él se mantienen muchos holgazanes.
Estados Unidos sólo tiene dos partidos “Demócratas” y “Repúblicanos”, la gente los patrocina, el gobierno no les da dinero como ocurre en México.
Si no lo quieren cambiar los legisladores, no nos resta más que votar por aquél partido político que vaya sólo, sin alianzas, que el presupuesto sea única y exclusiva para el partido triunfador y no tener que mantener con nuestros impuestos a dirigentes de partidos nefastos, donde pagamos su gasolina, sus comidas, sus rentas y hasta las despensas que regalan y sacan del gobierno, de nuestros impuestos.
La decisión es de usted amigo elector, usted con su voto puede cambiar y coincidir con Peña Nieto, porque al parecer su partido en el municipio, no entiende sus mensajes ni sus acciones de gobierno.
Buen día y Gracias por leerme!!
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